Té de belleza


Los amantes al té ya conocen las buenas propiedades de esta planta de origen asiático. La clasifición de tipos de tés se hace de varias formas, según el lugar donde se cultiva, según el tipo de fermentación a que se someten las hojas y según el tipo de planta de té. En viviendosanos hoy hablaremos del té de la belleza o el té de la longevidad, es decir, el té blanco.



El té blanco está hecho con las hojas jóvenes de la planta, es decir, con los brotes nuevos. Su nombre proviene del hecho de que la planta puede ser protegida del sol para evitar la formación de clorofila. Así se obtienen unas hojitas como veis en la fotografía.

Por qué se conoce como té de la belleza

Recibe este nombre por sus grandes propiedades anti-inflamatorias, anti-oxidantes, anti-colagenasa y anti-elastasa. Según un estudio de 2009 sobre las propiedades de 21 extractos de plantas y hierbas, científicos de la Universidad británica de Kingston descubrieron los efectos antienvejecimiento del té blanco. Puedes leer el extracto del estudio aquí.

Parece ser que las investigaciones probaron que el té blanco tenía propiedades antiedad y antioxidantes que podían prevenir algunos tipos de cancer, enfermedades del corazón, así como disminuía la descomposición enzimática de la elastina y el colágeno que acompañan al envejecimiento. La pérdida de elastina conlleva la aparición de arrugas, y la pérdida de colágeno reducen la elasticidad de la piel y con ello aparece la flacidez.

Además, el té blanco también tiene efectos antiinflamatorios y contribuye a mejorar los síntomas de la artrosis reumatoide. Hasta ahora se creía que el té verder era el té más saludable, pero ahora, en cuestión de temas de belleza es el té blanco el que ha ganado con creces la partida.

Foto| Lateasquirrel en Wikipedia