La obesidad y el sobrepeso son un problema real hoy en día. El estilo de vida sedentario sumado al crecimiento imparable de la comida rápida han hecho que muchos de nosotros no tengamos idea de qué hacer para no engordar. Aún así, puede que seas víctima de alguna de estas insospechadas causas del aumento de peso:
Cafeína: Muchos se consideran verdaderos adictos al café y a las bebidas energizantes. Muchos incluso disfrazan el café con crema batida y azúcar sin saber que una taza de frapuccino posee alrededor de 500 calorías. Teniendo en cuenta que el cuerpo no obtiene sensación de saciedad por parte de las calorías líquidas, estamos consumiendo el equivalente calórico a un almuerzo mediano sin saciarnos.
Por otra parte, la cafeína nos da sensación de energía bloqueando un neurotransmisor que le hace creer a nuestro cuerpo que estamos en posición de riesgo, lo que hace que nuestro metabolismo entre en modo “Sobrevivir”, lo que disminuye la quema de calorías al mínimo.
Ahorrar dinero: Más de uno leyendo este artículo ha comprado alimentos en grandes cantidades para aprovechar un descuento. No es extraño que los comercios de todo tipo nos ofrezcan increíbles descuentos por comprar más de dos unidades de algo, o que los alimentos sean mucho más baratos por unidad de peso si los adquirimos en cantidad.
Por el precio de una salida a un restaurante podemos conseguir abastecernos de cereales por un año. El problema con esto es que, en el instante en el que llegamos a casa comenzaremos a devorar lo que sea que hayamos comprado en cantidad, porque sabemos que tenemos muchísimo más almacenado. La consecuencia de esto es que terminamos consumiendo el doble de este alimento en cuestión. Según el Journal of Marketing Research, el entusiasmo por la compra nos durará una semana aproximadamente, y luego simplemente nos hartaremos y dejaremos de consumir eso que hemos comprado.
